jueves, 25 de enero de 2024

PARA CONSTANCIA DE MI CONSTANCIA. ALGO MÁS QUE UN INCIDENTE DE RECUSACION, EN LA CAUSA DE LA CANCELA.

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El padre de la criatura dijo...

2.1 SOBRE LA CAUSAL DE RECUSACIÓN INCURRIDA POR SU SEÑORIA
En el día de hoy y a tenor de lo ocurrido al inicio de la audiencia previa al iniciar la vista, y en mi turno de palabra, pidiendo la venia a su señoría y haciendo saber que intervenía en estricto derecho para con mi defensa condicioné hacer mías las cuestiones previas ya aportadas, siempre y en cuanto su señoría respondiese a una cuestión que le suscité. “va usted a corregir la falsedad vertida en el auto de prueba de mayo 2021, por el que su anterior predecesora la Juez Inmaculada Nevado, no citó a declarar a Don Victorio Domínguez Muñoz, alegando que no existían los datos para su notificación y localización. Siendo esto totalmente falso. ¿Sí su respuesta es en sentido contrario, tanto si lo hace ahora como si lo hace luego?. Insto en este preciso momento incidente para su recusación”.
Respondiendo que esa recusación se había ya resuelto con anterioridad y que la titular por aquel entonces ya no conocía de este asunto. A lo que aduje pidiendo la venia que no era esa la cuestión, reiterándome en lo primeramente por mi dicho, es decir ¿qué, si iba o no a corregir la falsedad manifiesta señalada? a lo que respondió enfatizando “!Claro! no te quedaba otra”, extremo que fue allí escuchado por todos los presentes.
Volviendo a insistirme en idénticos términos, eludiendo responder al verdadero sentido de mi pregunta, evadiendo la respuesta diciendo que lo que yo planteaba era una cosa ocurrida ya hace años y que lo que suscitaba era una cuestión atemporal y por tanto prescrita…A lo que pidiendo la venia le hice hincapié que no era una cuestión atemporal, pues mí recusación iba dirigida con su señoría ¿sí persistía en no contestarme o no proceder contra esa falsedad? Negativa u omisión que estaba ocurriendo en ese momento.
Aduje que esto estaba ya planteado hace años y meses tanto en escritos de protesto como en mi escrito de cuestiones previas ultimo al que me respondió en su providencia ultima que me contestaría cuando lo plantease hoy en la vista.
Siempre pidiendo la venia en mis intervenciones, me respondió que no me iba admitir la recusación a lo que le dije que entendía que eso habría de resolverlo otra instancia y que el ministerio fiscal o el resto igual tenía algo que opinar.
Adujo que hiciera un protesto, y pidiendo la venia dije que no se trataba de una protesta sino de una recusación.
A lo que aseveró que, de ningún modo, que ella era la que lo decidía si la admitía o no.
Momento que de modo respetuoso y pidiendo una vez más la venia le indiqué a su Señoría que me veía entonces obligado a abandonar la sala. Con este mi proceder defendía la honorabilidad y prestigio que inviste el estar togado, lo que por dignidad y respeto me vi abocado hacer, desde el momento mismo que no podía ejercer mi defensa al recusarle.
Permanecí en el exterior de la sala durante un rato y luego bajé al bar a tomar un café. Finalmente decidí venirme al pueblo, para escribir esta recusación.
Como se puede advertir, estas manifestaciones son todo un despropósito para una justicia que se precia como garantista e imparcial y en la que albergar confianza.